El pasado sábado 15 de septiembre el mundo celebró el Día Internacional de la Capa de Ozono. En todos los países se realizaron campañas lúdicas para recordarle a la gente la importancia de proteger esa fina capa de gas que mantiene a la Tierra a salvo de los rayos ultravioleta.
Hace dos décadas un grupo de científicos descubrió que la capa de ozono, ubicada en la estratosfera y cuya función es filtrar los rayos ultravioleta potencialmente mortales para los seres vivos, se estaba agotando. Esta reducción anormal se observa especialmente en los polos del planeta. Hoy se sabe que sobre la Antártica la pérdida de ozono llega al 70 por ciento, mientras que sobre el Ártico la reducción es del 30 por ciento. Si no se implementaba una drástica reducción de la producción de CFC (Clorofluorcarbonados, que son los principales agentes agotadores de la capa), este fenómeno se empezaría a replicar en otras partes del planeta, con consecuencias catastróficas.
La ‘Evaluación científica del agotamiento del Ozono 2006’ concluye que aunque los niveles de CFC se están reduciendo considerablemente en todo el mundo, lo más probable es que el ozono se siga agotando en las regiones polares en los próximos 10 a 20 años. Aun con una prohibición absoluta de los químicos agotadores de la capa, su recuperación total no vendría antes de 2065.
El principio de la precaución aconseja no esperar hasta que el daño sea irreversible. Si seguimos esperando las pruebas de que el modelo de desarrollo actual está ejerciendo una presión insostenible sobre el medio ambiente, quizá nuestros hijos y nietos no hereden una Tierra sino un infierno. Revista semana, 2017.
En el mes de septiembre, la Empresa de Acueducto y Alcantarillado EIS Cúcuta conmemoró el mes de la preservación de la capa de Ozono donde el área ambiental evaluó la huella de Carbono de sus servidores, para así conocer la cantidad de emisiones de Dióxido de carbono generadas por las actividades diarias y su afectación directa en la atmosfera.
La metodología para la medición, constó en medir por medio de una aplicación creada por estudiantes de universidades Colombianas, la cantidad (Toneladas) sobre el tiempo (Años) del gas invernadero CO2 (Dióxido de Carbono), la aplicación pide al usuario responder varias preguntas sobre algunas actividades diarias, ej: digitar la cantidad de veces al día en que usas el transporte público y una vez obtenido el resultado, la App menciona la cantidad de árboles que se deben sembrar por la cantidad de toneladas que producimos. Esto con el objetivo de mitigar la polución generada por nuestras actividades diarias.
El proyecto tendrá una continuación con un programa de reforestación el cual será el compromiso de los contratistas y directivos de la entidad, para hacer de nuestra atmosfera, un lugar libre de polución y nuestra capa de Ozono, una barrera que siga protegiéndonos de los rayos UV. Pues únicamente mediante las buenas prácticas ambientales referentes a cambio climático mundial, podemos abrigar la esperanza de lograr un desarrollo sostenible para todos.